Apartir de los 30 años, las personas ya han tenido experiencia en el mundo laboral y han desarrollado las competencias mínimas que exige ese mundo. Por ello, se espera de ellos una transformación y evolución de sus habilidades Descúbrelas las competencias claves que requieres en este artículo.

Cada etapa de la vida profesional tiene objetivos distintos. Cuando se tienen 20 años se necesitan formación e iniciativa porque es la época de las oportunidades, pero a los 30 se requiere una mezcla entre conocimientos, experiencia y resultados porque es la época del desarrollo y del crecimiento profesional.

Es el momento en el cual las personas deben sacar provecho del aprendizaje inicial y esforzarse por agregar el valor que los haga diferentes al resto de los colaboradores de la empresa.

Algunas competencias claves a considerar:

• Tener capacidades de negociar y resolver conflictos
Además de la formación académica y profesional, las empresas buscan empleados capaces de negociar y resolver conflictos. No siempre es fácil lidiar con otras personas, sean clientes, proveedores o colegas. Sin embargo, hay profesionales que cuentan con gran habilidad para resolver de manera rápida y eficaz los obstáculos que se le presentan. Esta es una cualidad que tiene que ver con la tolerancia a la presión. Para negociar y solventar conflictos también es necesario contar con inteligencia emocional y social, que está relacionada con la empatía y la sociabilización.

• Participar en las decisiones
Las empresas necesitan empleados con la iniciativa suficiente para participar en la toma de decisiones. De hecho, según HAYS, una empresa multinacional de selección de personal cualificado, esta es una de las cualidades más valoradas por las empresas al momento de contratar. Los profesionales deben ser capaces de tomar la iniciativa en el desarrollo de proyectos creativos, emitir opiniones o hacer propuestas de soluciones a los problemas de la empresa. Por otro lado, para mostrar esta habilidad los profesionales no necesitan tener un puesto de alta jerarquía: pueden hacerlo al trabajar con cierta independencia en el área que le corresponde, según explica Jaime Martínez, especialista de CIDAC (Centro de Investigación para el Desarrollo, A.C de México).

• Manejar y orientar equipos de trabajo
Los profesionales de entre 30 y 40 años suelen tener entre sus responsabilidades el manejo y la orientación de equipos de trabajo. Por ello, las empresas esperan que sus empleados cuenten con los conocimientos necesarios para guiar a su equipo y también con habilidades interpersonales que les permitan transmitir su mensaje de forma correcta y entendible. La comunicación es clave para los entornos laborales y mantener esta fluidez se reflejará en una mejora del trabajo en equipo y en el ambiente laboral.

• Asumir nuevos cargos con sus respectivos retos
En esta etapa laboral los profesionales aspiran a ser promovidos después de un tiempo. Por ello se enfocan en el crecimiento y el desarrollo profesional y las empresas esperan que sean capaces de asumir nuevos cargos en sus organizaciones. Los empleados de entre 30 y 40 años también se caracterizan por ofrecer un retorno rápido de la inversión y por su capacidad para adaptarse a los equipos de trabajo, razón por la cual son profesionales muy demandados por empresas de todo tipo.

• Buscar mayor proyección profesional.
Estos trabajadores saben que están en la etapa más importante de su carrera profesional. Han comenzado a asentarse como profesionales y conocen bien la dinámica laboral porque tienen ya varios años de experiencia. Además, dado que empiezan a tener otras obligaciones (cargas familiares, compra de casa, vehículo, etc.), tienen más ganas de salir adelante y eso los impulsa a tener metas ambiciosas. A las empresas les conviene esta actitud porque requieren gente decidida a llegar lejos.

Si estás en los 30 de seguro ya tienes una visión de hacia dónde quieres llegar y lo que quieres alcanzar. Las empresas necesitan saber que tienes una gran capacidad de adaptación a los equipos de trabajo, además de conocimientos técnicos y competencias profesionales. Así tendrás más oportunidades de ser contratado.