Evolucionar es parte de la condición humana. Internet es el principal impulsor del cambio del estilo de vida. Acciones tan simples como pedir comida a domicilio se hicieron mucho más sencillas y eficientes con el uso de plataformas. O incluso pagar las facturas por la banca online. Esto fue el inicio de la evolución tecnológica doméstica. ¿Cuál es la situación actual? ¿Cómo es la vida familiar en esta era en donde todo —o casi todo— se puede hacer con el smartphone?

Te presentamos 3 tendencias:

Finanzas familiares

El control de las finanzas familiares también ha evolucionado en los últimos años. Y es que la tecnología, bien implementada, puede ayudar a tener finanzas más sanas. Por ejemplo, hay diversas aplicaciones como Bankity, Haga Cuentas, Mint o Fintonic que permiten controlar los ingresos y gastos y así mejorar la economía familiar o establecer metas de ahorro.

Bankity es una startup financiera colombiana que nació para crear conciencia financiera en los usuarios. Su app predice los hábitos de consumo del usuario, establece qué cantidad de dinero gastará semanalmente, informa el estado de su saldo o cuántos intereses paga por cada compra a crédito, entre otras cosas.

Haga Cuentas, por su parte, es una aplicación con la que es posible crear presupuestos y agregar movimientos de ingresos y gastos. Mint y Fintonic también permiten llevar un control de los gastos y contrastarlos con los ingresos para saber cómo se están gestionando las finanzas familiares.

Así mismo es posible utilizar plataformas para comparar precios. En el plano de las finanzas, este es un hábito muy útil: una investigación previa sobre lo que se necesita o se quiere comprar ayudará a elegir mejor, no solo en cuanto a la calidad de los productos o servicios, sino también respecto a su precio. Según datos del comparador de precios español Idealo.es, las familias pueden ahorrar hasta casi un 50% si comparan precios antes de comprar artículos en Internet.

Hay diversas aplicaciones como Bankity, Haga Cuentas, Mint o Fintonic que permiten controlar los ingresos y gastos y así mejorar la economía familiar o establecer metas de ahorro.

Internet de las cosas (IoT)

Al hablar de la evolución digital que experimentan ahora los hogares, basta con referirse al Internet de las cosas y la interconexión de los objetos cotidianos.

Ahora la casa es un espacio inteligente porque muchas de sus cosas (como las luces, las cortinas, las cámaras de vigilancia o los enchufes) pueden controlarse por medio de aplicaciones móviles. Los electrodomésticos también son parte de esta evolución: es posible encontrar aspiradoras que limpian solas o neveras inteligentes con cámaras en su interior que permiten ver con el smartphone qué productos faltan y así hacer una compra más acertada.

Existen otros elementos básicos del hogar que pueden conectarse a Internet, tal como los espejos y las cerraduras. Un espejo inteligente es un artículo que al conectarse a la red puede informar al usuario sobre su peso, hidratación corporal o calidad del sueño, entre otros indicadores. En cuanto a las cerraduras, hay modelos con teclados numéricos que se instalan en la puerta y otros que se controlan con el smartphone.

Según apunta Antonella Solari, gerente de Productos Móviles de Samsung Chile, las innovaciones de IoT para el hogar contribuyen a mejorar la calidad de vida porque responden a diferentes necesidades, como la eficiencia de recursos y el ahorro de tiempo.

Opciones de entretenimiento

Otra de las herramientas familiares que ha evolucionado en la era digital es todo lo que tiene que ver con el entretenimiento. Alquilar una película y verla en el sofá de la sala es cosa del pasado. Con las plataformas de streaming como Netflix o HBO GO las opciones de entretenimiento están a un clic de distancia. Además, cada miembro de la familia puede ver lo que más le guste en su propio dispositivo.

Los asistentes de voz como Alexa o Google Assistant son otras de las tecnologías que están haciendo evolucionar el entretenimiento y la forma de comunicarse en el hogar. Con los altavoces inteligentes se tiene en casa un parlante con el que se interactúa mediante simples comandos de voz. Estos dispositivos están diseñados para ejecutar órdenes, por lo que los usuarios podrán pedirle que reproduzca la música o los podcasts favoritos, por ejemplo.

Estos aparatos inteligentes son más que reproductores de audio. Los asistentes que incorporan pueden responder preguntas con mucha precisión, por lo que resultan una herramienta muy útil para los niños al momento de hacer sus tareas escolares.

Son muchas las ventajas que la tecnología ofrece a la vida familiar. Hasta ahora es evidente cómo estas herramientas tecnológicas mejoran la dinámica familiar y facilitan algunas tareas cotidianas. Lo que se ve hasta ahora parece ser solo el comienzo de un mundo automatizado, en el que las personas no son las únicas capaces de comunicarse o interactuar con los dispositivos, sino que ellos mismos lo harán entre sí para hacer del hogar un espacio más inteligente.

Lo que se ve hasta ahora parece ser solo el comienzo de un mundo automatizado, en el que las personas no son las únicas capaces de comunicarse o interactuar con los dispositivos